lunes, 3 de septiembre de 2007

De frente mortadela

Hay demasiadas calles en las ciudades
Hay demasiados hombres que me gustan
Hay demasiados libros
Hay demasiados lenguajes
Y es que hay tanto
Tanto que aprender para después morir
Que ya no se si quiero masticar demasiado
Hacerse a un lado
Y no estas afuera tampoco
El jueves pasado en un taxi con tres amigas, hablamos del miedo que tenemos todos a la defunción
Dije que odiaba que se tratase al tema como algo malo, siempre relacionándolo con lo negativo. SE MURIO ROSA HUUUUUUUUU QUE MAL POBRE. ELLA QUE ERA TAN BUENA.
Y que saben si esta todo mal?
Que mierda es morirse?
Ehhhh?
Una de mis amigas dijo que es el miedo a lo desconocido o el amor por la vida lo que nos produce ese rechazo a la llamada muerte.
Pensé en que vivimos tan alucinados por las paredes de la misma humanidad, que pensamos la vida como eso, no vivimos para morir porque estamos aterrados. Es mas preferimos ni pensar en ello, casi como si no existiese, la mencionamos como a un raro accidente del que se dice poco y se cambia de tema rapidito para que nadie llore.
Cuando recapacitamos en la expiración concientemente, cambia por completo la vida, cuando nos acordamos de que nos vamos a morir, nos acordamos también que no sabemos lo que va a pasar y por ende tampoco sabemos realmente que nos esta pasando, ahora, en la vida, “en lo natural”, y allí es cuando surge esa angustia existencial, propia de la ignorancia de los vivientes aquí en el barro.
Y ahí es que decimos: No entiendo nada , la verdad todo esto que parece tan coherente todo esto de lo que existo, es ridículo, es raro , soy raro, soy un demonio encarnizado falto de nociones absolutas, falto de verdades, lleno de incoherencias, de líneas sobrenaturales sosteniendo un cuento perfectamente increíble.
No entender
Esta demasiado bien
Acordarte de la muerte
Es como no comerte ningún mambo
Es como no creerte lo que te dice el monstruo mental
Es como ser loco para toda la extravagante materialidad
Que es
Esta preciosa historia de incertidumbres

4 comentarios:

sr.hendrix dijo...

asombroso!

Uriel Nicolás dijo...

yo kiero-creo ver a la muerte como algo simple y banal..como algo mas dentro de todos mis dias
kiero alejarme de alguna emocion que me despierte la muerte como tal, kiero q suceda en mi y en mis semejantes sin q se me mueva un pelo.
a veces el pensamiento me lleva a desvirtuar por completo la nostalgia, la tristeza o la alegria q eso me pueda provocar

pero no puedo,
y a veces simplemente lloro con pensar mi propia muerte, o la de otro. y no entiendo!
pero tampoco kiero entender, kiero sentir y corresponderle a eso de una manera "natural"
el dolor de cuando alguien se muere y te deja...sera instintivo?
o tiene q ver con otras cosas y conceptos-convenciones??

los animales lloran la muerte de un par suyo, apapachan al moribundo hasta el sese


beso cande! enorme

Julian Barabino dijo...

Yo de la muerte, recuerdo verla con mascarilla.
Ella me queria dar un beso, y no me anime a sacarsela.
Le dije: No abuela, no debo sacartela. Y se fue.Adonde nose.
No pienso en la muerte, por que es parte de l a vida.
Yo ese dia no lloré. Fue para mi, una experiencia excepcional.Todo junto, el amor, la muerte, la vida de los que siguen, y el cigarrilo, que estaba mas encendido que nunca.El vino, que dejaba mis diente azules.Cuatro paredes y un amigo. Palabras risas, la muerte habia pasado y nosotros alucinandola como un estrella.
pienso un poco en ella. Y en el beso, que se quedo atrapado en este mundo.
A veces la sueño y se que es ella, que viene a verme.

nyx dijo...

Cande, te extraño.
Te leí y te extrañé aun mas.
Eso es vivir...
amar.
te amo.